jueves, 14 de enero de 2010


Pasan los dias, y con ellos cambiamos y maduramos. Sentimos nuevas cosas y dejamos de sentir otras muchas. Experimentamos... actuamos sin pensar, impulsivamente y a veces no lo hacemos de la mejor forma... Pero sin errores no habría aciertos, y sin aciertos no habría errores, y lo más importante es que debemos saber que si nos equivocamos podemos rectificar. Con el tiempo aprenderemos que el orgullo no lleva a ninguna parte y que aunque pese más que nosotros a veces lo mejor es dejarlo de lado, si queremos conseguir algo.